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Cuál es la situación de nuestros sistemas productivos:

Según diagnóstico realizado en 2018, por SWISSAID, los sistemas productivos de las familias campesinas de los Palmitos han sufrido una serie de cambios a través del tiempo ligados a las bonanzas agrícolas (algodón y tabaco) que llegaron a los Montes de María. Al tiempo de las afectaciones en las dinámicas territoriales, que el conflicto armado configuro y que por más de 50 años padeció la región. Tras la llegada de la revolución verde, muchos de los cultivos tradicionales que por años se habían venido desarrollando en la región, se fueron tecnificando y prefiriendo ante muchos otros cultivos de semillas criollas, que no mostraron mayor atractivo en términos económicos. De este modo la yuca, el ñame se posicionaron como los productos predilectos para la venta de los excedentes de producción. Con la llegada de los monocultivos de algodón y tabaco, que se empezaron a realizar ciertas “exigencias”, a nivel de paisaje, esto es deforestar para que dichos cultivos pudieran desarrollarse exitosamente, de forma paralela la ganadería extensiva, se ampliaba dentro de los sistemas productivos de los pequeños y medianos productores, siendo estos tres sistemas de producción los que ofrecían los ingresos económicos para las familias.

Fue así como el paisaje empezó a simplificarse por medio de la deforestación                                                         promovida para el establecimiento de dichos sistemas, llegando incluso hasta la orilla de arroyos que, para la década de los sesentas, mantenían agua aun en épocas de verano. Adicionalmente, el paquete tecnológico asociado a cada cultivo hizo sus aportes para la contaminación y posterior agotamiento del suelo. La crisis no se hizo esperar y los productores debieron regresar al cultivo de pan coger esta vez con el agravante de que los precios en los costos de producción y la gestión de los intermediarios imponían a la renaciente producción del pancoger.

La ganadería comenzó a ser entonces dentro del pasado más reciente, la alternativa económica para las familias campesinas, ante las varias dificultades de la producción agrícola. Es así como la inclusión de la ganadería dentro de los sistemas productivos, también ha reconfigurado tanto la economía campesina en la región como la dinámica territorial actual, la cual ha ido desplazando  progresivamente a  la agricultura en cuanto a extensión e importancia dentro de la economía familiar; sin embargo el estado de deterioro de los suelos, la cada vez más frecuente prolongación de los periodos secos, a causa del cambio climático, está incrementando la trashumancia, y la muerte de ganado por falta de disponibilidad de alimento  y agua;  tampoco la ganadería resulta rentable para los campesinos y ganaderos en la zona.

Suelos deterirorados:

Según Carsucre en su estudio del 2018, la zona de sabanas está en un 100% en riesgo de desertificación, es la última etapa del proceso de degradación de la tierra debido a su mal manejo. La degradación se inicia con la reducción de la productividad y termina con la pérdida total del suelo; cuando esto sucede, la desertificación es prácticamente irreversible.

En el diagnóstico realizado por SWISSAID  en 2018 en el municipio en 14 veredas del municipio con 158 familias, se concluye que los suelos de las familias productoras se encuentran degradados.  Se evidenció erosión laminar superficial de los suelos, a causa del arado de disco, lo que está llevando a una insostenibilidad de la producción agrícola. 

 De otro lado  El análisis de la composición fisicoquímica de los suelos realizados por la Universidad de Sucre, para este estudio, (ver tabla),  evidenció que los suelos están pobres en materia orgánica y potasio, pero con alta concentración de calcio, magnesio y sodio; lo cual tiene efectos negativos sobre el desarrollo de los cultivos y estructura del suelo.

Las acciones  que promovemos

Desde el proyecto “Fortalecimiento organizativo del  Equipo Agenda Rural y Resiliencia de los sistemas productivos en Los Palmitos”, auspiciado por Swissaid, se está implementando un piloto de reconversión productiva con 157 familias que implica generar cambios culturales para cambiar nuestros sistemas convencionales de producción que ya han demostrado no son sostenibles, por  la implementación de sistemas sostenibles: silvopastoriles, agroforestales, y de cultivos asociados, que permitan garantizar una producción que apueste a la recuperación y conservación de semillas, los suelos, el agua.  Para lograrlo se han realizado las siguientes acciones:

Establecimiento de planes de recuperación de semillas criollas y casas de semillas para su multiplicación. (14 casas de semillas en total en el municipio)

Construcción y/o ampliación de jagüeyes como reservorios de agua para la producción (75 jagüeyes construidos a la fecha para 83 familias)

Implementar sistemas silvopastoriles, a cambio de los sistemas de potreros convencionales.  Sembranos  nuevos pastos, pasto Tanzania,  arborizamos los potreros con especies nativas forrageras y frutales. Dejamos áreas de conservación aisladas para su recuperación natural.

Para las áreas de cultivos asociados estamos haciendo cambios en las prácticas de manejo de suelos, con arado de cincel y uso de curvas de nivel y zanjas de infiltración;  como estrategia para disminuir la erosión, la salinidad de los suelos  y garantizar mayor infiltración de agua.

Para todo esto ha sido necesario sensibilizar y capacitar al productor mediante Escuelas Agroecológicas de Campo en las 14 veredas, donde aprendemos el daño que hemos hecho con nuestras prácticas convencionales de producir y  cómo podemos implementar estos sistemas de forma más sostenible.

Esperamos que los resultados de este proyecto piloto se constituya en referente para el municipio y las entidades competentes y pueda ser replicado progresivamente en el 100% de nuestro territorio rural. Así Nueva Esperanza está contribuyendo con el desarrollo rural de nuestro municipio, la seguridad alimentaria con perspectiva agroecológica para la sostenibilidad productiva y ambiental que se requiere en tiempos de cambio climático.

Cuál es la situación de nuestros sistemas productivos:

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