Recuperación Ambiental

Apartes del diagnóstico ambiental en 14 veredas del municipio (año 2018)

Ejercicio diagnóstico realizados en 14 veredas del municipio de Los Palmitos, por Equipo Agenda Rural con orientación y apoyo de Swissaid, permite concluir que el territorio enfrenta un deterioro progresivo del recurso suelo y de la biodiversidad; componentes vitales para la reproducción social de las familias, la seguridad alimentaria y permanencia en el territorio tales como el agua y el bosque han ido desapareciendo del territorio, el municipio se enfrenta a un proceso de desertización (se está volviendo progresivamente un desierto).

Esta es la situación ambiental en el municipio:

1) Perdida de disponibilidad y calidad de agua: en periodos de tres a cuatro décadas, el territorio en general ha perdido la disponibilidad y calidad de agua de fuentes naturales lo que se evidencia en mayor proporción en épocas de verano. Si bien las condiciones climáticas y geográficas donde se ubica el territorio, están determinadas por épocas de verano e invierno, fuertemente marcadas, según los participantes las condiciones actuales han cambiado substancialmente, dado que los arroyos esta secos en verano cuando antes mantenían agua en esta época y por su parte las lluvias, ahora son más fuertes y transcurre más tiempo entre un evento y otro. Para el caso de Naranjal, el arroyo Arenal, aguas abajo la deforestación es total por lo que el agua allí no es permanente en solo 4 años perdió el agua que albergaba, lo cual también fue consecuencia de la extracción de arena que se realizó en su lecho. En el arroyo Cruceta, solo los ojos de agua cuentan con el preciado líquido, el resto del arroyo pasó de ser un arroyo permanente en la década de los ochenta, a uno temporal en la actualidad. En el sector de Cañito, el Recreo y Palmas de vino, los arroyos se caracterizaban por tener la flora y fauna típica de la región con aguas permanentes, en la década de los años setenta; hoy en día son solo temporales como el arroyo Hatillo, los bosques de las rondas hídricas han desparecido y son comunes los desbordamientos debido a que las coberturas naturales son mínimas, tal como ocurrió recientemente con el arroyo Los Bleos. Los bosques eran la cobertura predominante en el sector, y los propietarios de las fincas de grandes extensiones eran la población predominante en la zona, quienes permitían a los campesinos trabajar para que “civilizaran las tierra” talando los bosques y transformándolos en grandes extensiones de potrero.

2) Pérdida de coberturas boscosas: Los bosques asociados a los cuerpos de agua que hace solo 40 años contaban con el líquido en abundancia albergaban además, fauna y flora asociada a su permanencia. En varios sectores existían guaduales que rodeaban los arroyos. La deforestación para el establecimiento de cultivos y pastos avanzó de modo tal que en Naranjal los caracolís, solo sobreviven en un sector mínimo. Allí mismo el arroyo Ahuyamal, es el único que tiene relictus de bosque ripario, porque el resto de los arroyos, según las familias de este nodo, lo que tienen en las orillas es “puro potrero”. “Cuando el avance de la deforestación en rondas hídricas, no había llegado al estado actual, los arroyos mantenían agua”. En el siguiente cuadro se presenta las principales especies de árboles identificadas por los habitantes y su estado

3) Pérdida de diversidad de fauna: En el territorio en general según los participantes de todos los encuentros hace menos de cuarenta años, existían diferentes animales en abundancia, como venados, tigrillos, zorro perros, osos hormigueros, pumas y hasta jaguares; según lo explicaron los participantes del taller realizado en Canito con miembros tanto de esa comunidad como de Palma de vino y del Recreo, pues argumentaron había grandes montes para la década del sesenta, zonas en donde hoy abundan los rastrojos.

Acciones Estratégicas que se están implementando en el componente ambiental, con el apoyo de SWISSAID através del proyecto “Fortalecimiento organizativo del Equipo Agenda Rural y Resiliencia de los sistemas productivos en Los Palmitos”.

Recuperación de 50 has. de corredores biológicos de conectividad en función de arroyos de importancia ambiental en las veredas: Naranjal, Palmas de Vino, Cañito, Nuevo Cambio, Recreo. Se han aislado para su conservación y se cuenta con un plan para su enriquecimiento mediante la siembra de árboles; a diciembre 2019 se han sembrado 600 árboles, en el corredor de Naranjal. Se espera involucrar a comunidades aledañas de estos corredores para que nos ayuden con la siembra de más árboles, la meta almenos 50.000 árboles en las 50 has en recuperación.
Promoción de cultura de multiplicación de material vegetal (árboles) en predios y fincas. Se espera que almenos las 157 familias en 14 veredas, vinculadas al proyecto cuenten dentro de sus predios con un área bajo sombra donde se germinen semillas de árboles, que se recolecten en la época de verano, sean cuidados para luego ser trasplantados. Se tiene por compromiso que entre todas las familias se cuente anualmente por lo menos con 4.500 árboles nativos germinados y trasplantados en áreas de conservación de sus predios.
Establecimiento de dos viveros comunitarios en cinco veredas: Cañito, Palmas de vino, Naranjal, Recreo y Nuevo cambio. donde se involucran 60 niños y niñas que aprenden y ayudan a sensibilizar a sus familias, sobre la importancia de sembrar árboles y no tumbarlos. De estos viveros saldrán almenos 2.500 árboles con los que se seguirá recuperando diversidad, el sombrío, el agua.
Desarrollo de campañas de sensibilización que ayuden a parar la deforestación, a tener un mejor cuidado del agua, manejo de residuos sólidos y dar un mejor manejo a los suelos. Este año 2020 promovemos la campaña PARE YA.